El Studebaker: detalles históricos

Este clásico auto americano nació gracias a la familia Studebaker, que buscó al diseñador francés Loewy para crear un vehículo capaz de competir con los modelos Ford o Chevrolet de esa época. Quizás su gran auge se vivió sobre las primeras décadas del siglo XX. Con el tiempo, el Studebaker se transformó en un modelo norteamericano clásico.
Existen varios modelos que han resistido el paso del tiempo y son aún venerados por los entusiastas de los coches históricos: el Studebaker Daytona de 1963, el Studebaker 62, el Studebaker Cruiser, la versión Starliner, la Golden Hawk, el Skyhawk, el Studebaker Coupe 1950 o el Studebaker Avnti son algunos ejemplos.
La historia de la familia Studebaker es más que llamativa, ya que producía vagones para los militares durante la Guerra Civil. Sobre esa base, comenzaron a desarrollar y fabricar automóviles en los comienzos del Siglo XX. Alrededor de 1920, la compañía ya alcanzó reconocimiento como fabricante de rodados.
También desarrollaron vehículos militares durante la Segunda Guerra Mundial para el ejército estadounidense, como el anfibio M29 y el M29C Weasel Amphibious Landing Craft, dos recordados participantes de la contienda ecuménica. Posteriormente, también se embarcaron en la producción de la primera pick-up de la serie M, que apareció en 1941 y logró un gran éxito entre los granjeros americanos.
Vía |  De Automóviles