Bomba de agua y correa de distribución

¿Para qué sirven estos elementos del motor?. La bomba de agua es la encargada de movilizar el líquido refrigerante por todo el sistema de propulsión. En ocasiones es accionada por la correa de distribución, lo que torna más dificultoso su mantenimiento en óptimas condiciones.
Se trata de un bloque atornillado al motor, con una polea en su parte frontal. La bomba de agua es accionada en ocasiones por la correa de accesorios, que moviliza otros elementos como el alternador o la dirección asistida, por ejemplo. En algunos motores, sin embargo, esta tarea la realiza la denominada correa de distribución.
La bomba de agua tiene una vida útil de entre 50.000 y 100.000 kilómetros. Cuando la misma es accionada mediante la correa de distribución, ambos elementos deben cambiarse en conjunto. De lo contrario, si se produce una rotura de la bomba de agua es muy probable que se destruya la correa de distribución y que, en consecuencia, se produzca un grave daño en el motor.
¿Cómo advertimos un problema en la bomba de agua?. Este accesorio avisa habitualmente con un fuerte ruido o con fugas de agua antes de su rotura total. Si se concreta el colapso completo, se quema inmediatamente la correa de distribución, contando solamente con algunos segundos para paralizar el motor y evitar daños mayores.
Vía | Blog de Motor
Foto | E-avisos

Faros en mal estado

Un estudio realizado recientemente por la empresa Hella indica que un 35% de los conductores circula con los faros en mal estado. Esto puede poner en peligro la seguridad del conductor, de sus acompañantes, de los peatones y de otros conductores. ¿Comprobamos periódicamente el estado de nuestros faros?.
Hay que pensar que resulta vital ver con claridad en la ruta o en las calles, y que también es imprescindible que los otros conductores vean por donde va nuestro vehículo. Por consiguiente, es muy necesario realizar una revisión y mantenimiento periódico de los faros.
También hay que tener en cuenta que la llegada del otoño aumenta la cantidad de horas sin luz, por lo tanto resulta aún más importante saber que nuestros faros se encuentran en buen estado. Además, las condiciones meteorológicas que se dan en el invierno (lluvia, viento) reducen la eficacia de la iluminación de los vehículos.
Por ejemplo, solamente media hora de conducción por una carretera húmeda o con mucha suciedad posibilita que nuestros faros pierdan hasta 35 metros de visibilidad…En consecuencia, hay que tener en cuenta que es muy sencillo y rápido realizar el mantenimiento de los sistemas de iluminación, ahorrando al mismo tiempo frente a arreglos posteriores.
Vía | Motor Spain
Foto | Coches 20